El aloe Pholyphylla es una planta suculenta de la familia de las xantoroeáceas. Es originaria de la región sudafricana de Lesoto y se caracteriza por su original forma. Las hojas de este aloe no crecen en vertical, sino en espiral. Se enroscan en diferentes niveles que crecen directamente del suelo.
Es una planta de montaña que crece en altitudes superiores a 2.000 metros y se encuentra en peligro de extinción.
El aloe Pholyphylla puede alcanzar un diámetro importante superior a los dos metros. Sus hojas son carnosas y triangulares. Están rematadas por afiladas púas y son de color verde grisáceo. Expuestas al sol pueden tornarse de color asalmonado o violáceo.
Es capaz de almacenar en estas pencas una gran cantidad de agua, que absorbe de la humedad de su hábitat. Necesita riegos frecuentes, ya que procede de un lugar donde la niebla y las precipitaciones son abundantes. Se desarrolla en temperaturas de alta montaña que oscilan entre los -10 grados y los 30.
Florece con una especie de espiga que desarrolla una inflorescencia de color coral con repuntes dorados.
Se reproduce por semillas y necesita bastante espacio, por lo que se recomienda plantarla en macetas grandes.
Vía: plantasyjardines.es :-: Autor: Flordeguisante
