El lirio Araña, Hymenocallis littoralis, es una planta bulbosa de la familia de las Amarilidáceas, que crecen en América, entre Estados Unidos y Argentina.
El lirio araña nace de un bulbo de entre 7 y 10 cm de diámetro, del que brota un tallo con hojas sésiles, es decir, unidas a él directamente, y en forma de espada, que pueden alcanzar los 60 centímetros.
Presenta unas flores blancas, grandes, con forma de campanilla y olor a vainilla que crecen en ramillete al extremo de un escapo, o tallo fino y desnudo. La principal característica de estas flores es que su corola, es la membrana que une unos largos estambres afilados y ascendentes, y que presenta unos largos filamentos blancos que engalanan la campana floral dándole su particular aspecto aracniforme.
La Hymenocallis littoralis suele florecer en verano. No es una planta especialmente delicada, aunque conviene protegerlas del frío en invierno, y del sol directo en las estaciones estivales.
Durante su desarrollo, hay que tener cuidado con el exceso de riegos, para no pudrir las raíces, aunque los agradece durante el verano.
Conviene que los suelos sean arenosos, con humus y que estén bien drenados.
Se desarrollan muy bien en grupo, puesto que sus flores florecen así mucho mejor, sobre todo, si tenemos la atención de ir retirando las flores muertas. Además, es una planta adecuada para cercamientos o para delimitar espacios.
No suelen ser propensas a plagas u hongos, aunque su principal amenaza son los insectos: saltamontes, orugas o caracoles.
Vía: plantasyjardines.es :-: Autor: Flordeguistante
