Saintpaulia, serenidad y pequeñas explosiones de color sobre un manto verde
Violeta africana, ligeramente noble
La Saintpaulia tiene una pincelada de nobleza, debido a que lleva el nombre del Barón Walter von Saint-Paul-Illaire, que fue el primero en descubrir la planta a finales del siglo XIX. La Saintpaulia es originaria de África, concretamente de Tanzania y del sureste de Kenia. Crece allí en un ambiente húmedo y luminoso, y esas son las circunstancias en las que mejor prosperará en su casa. Es importante regarla con agua de forma regular, sobretodo en época estival y en su período de crecimiento, pero teniendo cuidado de que no quede encharcada pues en ese caso la planta se pudrirá. Es preferible utilizar agua tibia, y regarla directamente en la tierra y nunca vertiendo agua por encima de las hojas y ni de las flores. Como todas las plantas que tienen flor, necesitará luz natural, pero evitar un exceso de luz solar directa e intensa.
Menos estrés
Con todos estos cuidados básicos la Saintpaulia se mostrará bella y agradecida, y le transmitirá bienestar y tranquilidad. Una investigación llevada a cabo en la Universidad de Surrey, puso de manifiesto que las personas que tienen que llevar a cabo tareas, están menos estresados si las realizan en un espacio en la que hay plantas, que si carecen de ellas. Así que, la Saintpaulia, a parte de ser una compañera de piso ideal, y una planta agradable a la vista, también beneficia en sus niveles de estrés.
Via: www.plantadelmes.es